Los miedos y las fobias son registros de nuestro mundo emocional que tienen un circuito neuronal asociado. Podemos entenderlos como grabaciones cerebrales que se desatan ante ciertos elementos, personas o situaciones por el significado que tienen implícito para nosotros. Este significado se relaciona con contenidos de nuestra cabeza que han sido grabados en diferentes momentos de nuestras vidas, con palabras e imágenes generalmente asociadas a estados emocionales fuertes, en situaciones conflictivas que hemos vivido y que no hemos podido digerir. Por esta razón muchas veces la mera exposición a los miedos, en las situaciones correspondientes, no es suficiente para vencerlos definitivamente, si bien el exponerse es importante para superarlos.
Un miedo puede verse como una imagen emocional que, de la misma forma que se ha grabado en la cabeza con palabras e imágenes asociadas a un estímulo desencadenante, puede borrarse, para ser sustituida por otra imagen emocional positiva sobre nosotros mismos, que asociemos a estados de seguridad, fuerza, serenidad y determinación. Para esto utilizamos técnicas de visualización, afirmación y autosugestión consciente en estados de calma y relajación, que suponen la herramienta para cambiar esos registros cerebrales que nos impiden vivir con libertad. Esto supone aprender a respirar correctamente, a relajarse, y una vez uno sabe permanecer en un estado de relajación, aplicar estas técnicas autosugestivas manejando contenidos que previamente han sido hablados y analizados en consulta. Una vez puesto en marcha este proceso, la exposición a las situaciones, personas u objetos implicados en nuestros miedos pasa a ser un hecho con significado que nos resulta mucho mas fácil comprender y superar.